Nuestro Ayuntamiento continúa empeñado en que nuestra ciudad tenga un festival de música, como muchas otras localidades de nuestro país, de mayor o menor tamaño. Un empeño que desde este blog aplaudimos. En esta tercera edición, el evento cambiaba de nombre (de Poetas del Rock a Almenas Festival) y también ampliaba su número de localizaciones. Aparte de los conciertos de la tarde- noche de sábado en la explanada del Lienzo Norte, epicentro del festival, hubo actuaciones a lo largo del fin de semana en el Chico, el atrio de San Isidro y el Episcopio.
Precisamente el viernes en el Chico Giromazo daban el pistoletazo de salida al Almenas Festival con sus versiones de clásicos del rock de aquí y de allí. Un bolo al que no pude asistir por el desafortunado solapamiento con otro concierto de rock (como si abundasen en Ávila): las versiones de Loquillo y Burning que, con mucho oficio y estilo nos trajeron Huracán 66 al Auditorio de San Francisco.